El post de hoy es una reflexión dedicada a todas esas mujeres empoderadas y fuertes que apuestan por seguir su instinto, huir de las imposiciones y tomar sus propias decisiones.
Vivir es decidir
Esta fue una de las frases que escuché tras perder a mi hijo y se me quedó grabada a fuego, vuelvan a leer VIVIR ES DECIDIR. Bien, otro de los conceptos clave para mi este año ha sido entender qué es el paternalismo (gracias Nohemí Hervada) y qué impacto tiene en nosotras como mujeres adultas y responsables.
El paternalismo (por si hay en la sala otra despistada como yo, que tuve que pedir que me lo explicaran) es una actitud que adopta una persona cuando trata a otra con la autoridad y protección propias del concepto tradicional del "padre de familia" en relaciones de otro tipo. Vemos que la clave es la autoridad y superioridad sobre otro al que se considera débil o incapaz de valerse por sí mismo. Vivimos en esta cultura, todos somos en mayor o menor medida paternalistas con otros, si no dejamos a nuestra pareja hacer algo porque no sabe, si tratamos a los demás como incapaces de hacer algo sin nosotras, cuando nos tratan de "niña", "cielo", "rubia", ... y créanme es un ejercicio de contención y autoanálisis constante controlarlo.
Volviendo al tema que quería abordar, queridas mujeres del mundo: Vivir es decidir. Este es mi mantra: Soy una mujer, soy adulta, soy responsable, soy independiente y mi vida depende únicamente de mis decisiones. Y ahora mismo NO ADMITO el paternalismo. Cuando lo ejerces agota y cuando lo soportas te derrota. Y no lo podemos permitir. Nos van a criticar sí, es una posibilidad, pero que te afecte es tu decisión-
Pongo ejemplos al azar a ver si les suena alguno
Quizás has decidido que no quieres estudiar que eres feliz con el trabajo que tienes
Quizás has decidido vivir en la cuidad, en la montaña, o en la playa
Quizás has decidido vivir de alquiler en lugar de invertir en una propiedad
Quizás has decidido que tu pareja de toda la vida no te hace feliz, y le dejas
Quizás has decidido dejar ese trabajo por cuenta ajena y emprender tu sueño
Quizás has decidido tomarte un año para viajar
Quizás has decidido que no quieres ser madre
Quizás has decidido que sí quieres ser madre
Quizás has decidido que no quieres amamantar a tu hijo-a
Quizás has decidido que amamantarás a tus hijos hasta que decidas dejar de hacerlo
Quizás has decidido que escolarizar a tus hijos-as
Quizás has decidido no escolarizar a tus hijos-as
¿Qué necesito antes de tomar una decisión vital?
Necesito recabar información. Información completa y de varios puntos de vista.
Necesito escuchar diversidad de opiniones
Necesito valorar qué supone optar por una alternativa u otro (rara vez el mundo es blanco o negro)
Necesito ser honesta conmigo misma, ¿qué opción me hace feliz?
Necesito valorar que impacto tiene en mi relación de pareja o en mi entorno
He decidido. Ahora esa decisión es parte de mi vida.
La cuestión "conflictiva" es cuando nuestra decisión choca con los juicios, creencias, y vivencias de quienes nos rodean, y éstos no son capaces de dejar de lado su paternalismo, y simplemente apoyarnos desde el amor y el respeto. Y ¡OJO! no es que no nos quieran, es que no saben hacerlo de otro modo. Es normal que tu madre, tu padre, tus hermanos, tu pareja, tu mejor amiga, tu cuñada, tu suegra o quién sea te den su opinión, y si opinan distinto lo manifiesten, vale. Pero pon el límite, valora y agradece su preocupación por tu bienestar, pero deja claro que ya has decidido, y que te haría muy feliz contar con su apoyo.
Y perdón que me repita, pero ¿cuál es nuestro mantra? Vivir es decidir. ¿eres feliz con tu decisión? Pues ya está. Si decides enfocarte en las críticas que recibes, en que nadie te entiende, en que te sientes juzgada... esa emoción negativa te va a desgastar. Es agotador.
Decide por tí, quiérete, escúchate y simplemente VIVE.
Y lo que para mí es fundamental yo soy el ejemplo de mi hija. Si quiero que sea una mujer fuerte, libre, empoderada, que se quiera, se respete y sepa poner límites, tiene que ver que yo lo hago, y que no debe aceptar lo intolerable.
Esa es la generación que estamos criando entre todas. Una generación que entenderá que la auténtica revolución feminista será el AMOR, será respetarnos entre nosotras, será que no sea tolerable que una mujer critique a otra por como viste, a quien ama, o cómo educa o alimenta a sus hijos. Crear una red de apoyo entre mujeres será lo que marque la diferencia.
Y tú, ¿te sientes juzgada?
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